¡Hola!
Hoy os voy a hablar de uno de mis temas favoritos, los viajes. ¿No os parece increíble poder visualizar tu viaje soñado simplemente con leer un libro que escribió alguien que ya estuvo en ese sitio?
Aclarar dudas que te surjan, encontrar sitios nuevos que no conocias o hacerte una idea general de lo que es el viaje que te gustaía hacer, eso es lo que nos pueden contar los libros de viajes, que no siempre tienen que ser guías que se centran en alojamientos y sitios para comer, básicamente. Muestran fotografías de maravillosos rincones que se salen de los itinerarios habituales, experiencias vividas con la población local por el autor del libro, esto hace que nos encontremos en un mismo libro una historia mezclada con una guía más cercana.
A continuación os contaré un poco sobre mis libros favoritos:
Guía de EE.UU. en bus (Edgar Costa/Anaya Touring)
Sin duda mi libro favorito. Narra el viaje realizado por Edgar Costa y su hermano en este medio de transporte que permite ir de ciudad en ciudad desde Nueva York en la Coste Este hasta San Francisco en la Costa Oeste, visitando ciudades tan carismáticas como Boston, Philadelphia, Nueva Orleans, Las Vegas o Los Ángeles. En este relato podemos encontrar mapas, fotografías, recomendaciones y vivencias personales del autor. Totalmente recomendable si quieres visitar Estados Unidos o montarte tu propio viaje imaginario sin salir de casa.
A pie por Nueva York (National Geographic)
Si Nueva York es tu ciudad soñada como lo es para mí, no dejarás de buscar guías que te situen en la Gran Manzana. Esta guía nos cuenta desde viajes relámpago para conocer la ciudad en un día, paseos por los barrios emblemáticos, lugares imprescindibles como la Estatua de la Libertal, el Metropolitan Museum... sitios para comer bien, parques, jardines...
Esta guía nos proporciona mapas detallados bastante completos, fotos y consejos sobre el terreno que harán que la visita sea perfecta. Una guía amena y fácil de consultar.
36 hours, 125 fines de semana en Europa (Taschen)
Un precioso libro con miles de fotografías y una cuidada encuadernación entelada y con varios separadores de colores. Puede resultar el libro perfecto si eres un aficionado a los short break . Dedica varias hojas a cada ciudad de forma concisa, nos da diferentes ideas según queramos orientar nuestro fin de semana, puede ser cultural, literario, para niños...
A pesar de su gran calidad no es de mis preferidos, me resulta un poco aburrido la forma en la que está escrito. Está bien para buscar información pero no da lugar a la imaginación.
Viajar por el mundo (Lonely Planet)
Ver este libro y querer viajar a todos y cada uno de los rincones que nos propone es todo uno. Sus preciosas y abundantes fotografías y su información resumida pero totalmente útil lo hacen imprescindibles para los amantes de sus viajes. Cada una de sus 445 páginas ordenadas de forma alfabética nos llevan a conocer cientos de países, explicando en un par de hojas por país una breve introducción del mismo, así como información imprescindible, cuándo ir, lecturas para ambientarse, un pequeño diccionario con palabras básicas, así como particularidades y curiosidades de los mismos.
En las antípodas (Bill Bryson)
Libro dedicado a la lejana Australia. No me ha gustado especialmente porque mete mucho relleno y realmente no cuenta gran cosa. No me ha quedado claro qué visitar a parte de las cuatro ciudades principales. En general me lo ha presentado como un país inmenso pero aburrido. Creo que esta ocasión prefiero quedarme con la idea preconcebida que tenía de Australia.
Lugares que no quiero compartir con nadie (Elvira Lindo)
En esta ocasión Elvira Lindo me ha decepcionado. Este libro dedicado a Nueva York quizás sea adecuado para la gente que vive en esta ciudad, nos cuenta sus pequeños rincones favoritos, pero no creo que sirva para los viajeros desde el punto de vista turístico.
Amanecer en el Sudeste Asiático (Carmen Grau)
La autora lo deja todo para embarcarse en este maravilloso viaje (¡quien pudiera!). Es uno de mis libros favoritos sin duda.
Su forma de describir y ambientar el relato me hizo desear de inmediato conocer este continente, que hasta ahora me había pasado un tanto desapercibido.
Nos cuenta como disfrutar de estos países orientales recomendándonos lugares sin caer en el tópico de donde ir a comer, que comprar, ya que ella aconseja dejarse llevar y que todo vaya fluyendo de forma natural.
Como veis me estoy haciendo con mi pequeña biblioteca particular sobre viajes.
Abrir un libro y ponerme a soñar es todo uno. Podría contarse por cientos los lugares que me gustaría visitar, mientras llega ese momento me conformo con ellos.
Espero que os haya gustado y servido de ayuda.
Andrea
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